Nació el 27 de enero de 1939 en San Cayetano, Bolívar, y reside en la vereda de Palenquito, corregimiento de San Marcos de Malagana, Municipio de Mahates.
Petrona Martínez logró superar la marginalidad política de su territorio y trascender a ámbitos nacionales e internacionales gracias a la música de bullerengue, un campo de creatividad y conocimiento de la mujer cimarrona instrumentada con tambores artesanales.
Heredera de sus ancestras, campesina, matrona, recolectora de arroz, vendedora de dulces, sacadora de arena, madre, abuela y bisabuela. Con sus composiciones, Petrona retrata las realidades y los axiomas de la resiliencia matriarcal que desafía múltiples opresiones de la modernidad, como el machismo, el racismo, el clasismo y la discriminación.
Su canto amplifica las voces de las mujeres de su entorno y defiende una ancestralidad matriarcal que resiste ante una modernidad arrasante con las culturas tradicionales.
Petrona Martínez es la memoria viva de las historias de resistencia matriarcal y la tradición oral cimarrona, aprendida de sus ancestras bullerengueras y transmitida hoy a las generaciones venideras.
Es una secuela de una antropología cultural que se mantiene dinámica y resuena en los territorios cimarrones como una cosmogonía de voces múltiples y tambores ancestrales.
Guillermo Valencia Hernández (muñeco)