EXPOSICIONES: Llano llanero, Constantino Casteblanco

«El Llano llanero. Yo lo canto de pie, a grito herido y hasta enronquecer. En pie sobre mi arpa yo lo canto.

Canto su cielo limpio, bruñido y azul como una sala de dínamos. Sus ríos de afiebradas márgenes. Sus blancos pueblos bajo el océano de la luz. Su paisaje seco y orgulloso, con tiernos recodos en verde y agua. El Llano que me suena a somatén. Me huele a fogata y caballo nocturno y alcohol. Tierra desesperada, patria difícil y áspera. Tierra sexual, azogada, loca y alcoholada que me tira el corazón y las entrañas.

Me exaspera la sangre y la fantasía. Aquí el cielo es más alto pues los hombres caminan más erguidos a caballo. Aquí el día se levanta más temprano.»

Eduardo Carranza (Fragmento)

Las fotografías presentes en esta exposición, realizadas por Constantino Castelblanco (Bogotá), le presentan a los viandantes citadinos, un paisaje colombiano que resulta para muchos, profundamente desconocido y desconcertante. El tema central de Castelblanco, el cual viene desarrollando desde que fijó su residencia en Villavicencio, es el Llano.

Sus fotografías describen una naturaleza en la cual todo parece desmesurado, y a la cual podría perfectamente aplicarse la noción de lo sublime, en donde el cuerpo humano se siente traspasado por lo abismal y lo vertiginoso. Parajes inmensos, carentes de accidentes geográficos distintos a las formas del ganado y sus jinetes; vaquerías por territorios agrestes; ríos de impresionante anchura.