Perecível

Retratos en los barrios históricos de Fortaleza revelados sobre la clorofila de las plantas más comunes a los jardins de los condominios que la construcción civil que prolifera a lo largo de la ciudad. Si por un lado las hojas de la arquitectura contemporánea limitan las formas de los rostros, por otro el bricolaje de las caras captura la fugacidad del "soporte-hoja" para indagarnos acerca de las relaciones entre memoria y duración, acerca del pasar del tiempo en la ciudad. Se trata de deambular por la zona comercial, por la playa de Iracema, pero sobretodo por la Jacarecanga, un barrio huérfano de las elites de la metrópolis donde se percibe, en sus caserones y ancianos, vestigios de una ciudad que envejece. Aquí un cuerpo es vector de resignificación de memorias en amplia desgaste del sol, de los pies, de la construcción civil, de las historias, de las políticas, de las poesías. Aquí lo efímero es soberano.